Marcharon para reafirmar que
La marcha estaba convocada para las 17 horas del 1º de julio en el matrimonio es la unión
de un hombre y una mujer.
Un reducido grupo de personas, que padecen lo que el médico legista argentino Nerio Rojas, entre tantos otros, calificó con rigor científico, PERVERSIÓN SEXUAL (la homosexualidad), en actitud desafiante, se convocó a las16,30 horas a solo 100 metros de distancia de la otra marcha.
El pequeño corrillo que formaban en la Plaza , hizo que pasaran prácticamente desapercibidos.
Reunir mucha gente, a los políticos les cuesta mucho dinero, entre choris, birra y porro, colectivos y lo que hay que pagarle a los punteros y a cada uno de los asistentes.
Pero el ciudadano común, el trabajador, el estudiante, el jubilado, orgulloso de haberse formado en hogares con PAPA y MAMA, teme que algún día, un niño argentino tenga que decir: “MI MAMÁ SE LLAMA RAMÓN”.
Teme que en este avance contra la formación natural de la familia, el día de mañana se pretenda legalizar el matrimonio entre un hombre y su hija, con el argumento de que se aman (¿?), que no se los puede discriminar, que tienen derechos…
Por eso, las familias santafesinas no necesitaron que las “lleven” por $50, el choripan, la birra y el porro. Fueron movidos por el amor a la familia conformada por Papá, Mamá y los hijos. Estaban felices de defender la célula básica de la sociedad:LA FAMILIA. Eran miles, miles y miles de personas que siguiendo con lo previsto, marcharon hasta la legislatura. Pasaron a escasos metros del grupito que se había convocado para pedir que se legalice el matrimonio entre personas del mismo sexo. A pesar de la notoria superioridad numérica, no hubo ningún gesto ni palabra de provocación. La marcha no era CONTRA nadie. Era para defender a la familia. Tampoco se hicieron daños ni actos de pillaje...
Frente a la legislatura, a pesar de lo multitudinario de la marcha, algunos legisladores salieron al exterior del edificio y al pie de la escalinata, sin custodia, no la necesitaban, presenciaron el acto de los pacíficos ciudadanos.Cabe esperar que nuestros legisladores escuchen al pueblo que los ha votado para que los representen, y no que imiten ala Diputada Alicia Gutierrez, que solo “usa” al pueblo para que le de su voto, y luego lo desprecia manifestando que: “no se diga que la voz del pueblo es la voz de Dios, porque ya tenemos bastante cansancio auditivo con tal eslogan…”
Pero el ciudadano común, el trabajador, el estudiante, el jubilado, orgulloso de haberse formado en hogares con PAPA y MAMA, teme que algún día, un niño argentino tenga que decir: “MI MAMÁ SE LLAMA RAMÓN”.
Teme que en este avance contra la formación natural de la familia, el día de mañana se pretenda legalizar el matrimonio entre un hombre y su hija, con el argumento de que se aman (¿?), que no se los puede discriminar, que tienen derechos…
Por eso, las familias santafesinas no necesitaron que las “lleven” por $50, el choripan, la birra y el porro. Fueron movidos por el amor a la familia conformada por Papá, Mamá y los hijos. Estaban felices de defender la célula básica de la sociedad:
Frente a la legislatura, a pesar de lo multitudinario de la marcha, algunos legisladores salieron al exterior del edificio y al pie de la escalinata, sin custodia, no la necesitaban, presenciaron el acto de los pacíficos ciudadanos.Cabe esperar que nuestros legisladores escuchen al pueblo que los ha votado para que los representen, y no que imiten a
Un dato llamativo. La emisora LT 10 Radio Universidad Nacional del Litoral, publica en su portal (http://www.lt10digital.com.ar/home/index.php?acc=ns_fa&id=88836&id_hz=1), refiriéndose a la cantidad de manifestantes: "Según datos policiales serían cerca de 5 mil los manifestantes sumando ambas marchas." No aclarando la diferencia de manifestantes entre una y otra convocatoria.
El lector saque sus propias conclusiones...
El lector saque sus propias conclusiones...
Orlando Agustín Gauna
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